Una adaptación mediodre, como audiencia, no sentía ninguna pena de la vida trágica de las dos mujeres, porque la película se centraba en el proceso de desentrañar los misterios, en las escenas en que el protagonista, también con su compañero, se hacían el guapo desde el principio hasta el final de la película.
Diferente de la obra original, se borró un personaje masculino que ayudaba a cuidar al hijo del protagonista, y se añadió la de la abuela, con quien el protagonista dejaba a su hijo para que lo cuidara, así que la personaje femenina volvía a la posición tradicional en la sociedad, mientras el padre podía aventurar e intentar ser un héroe, aunque el caso no era su trabajo porque estaba en las vacaciones por la herida.
De esta manera, la obra perdía su equilibrio entre resolver el caso y revelar la tragedia de los marginados, entre los rompecabezas y los sentimientos. Es decir, perdía la profundidad y desafortunadamente se convertía en una pura película de detectives, en una de los hombres malditos. Quiero que el protagonista lleve su maldito caso a la muerte, regrese a casa y cuide bien a su propio hijo, porque en realidad, ¡este caso no tiene nada chingada que ver con él!